En medio de la crisis por el fentanilo, el presidente mexicano, López Obrador, busca cooperación de China mientras que el canciller Ebrard rechaza las afirmaciones del senador estadounidense Graham sobre la supuesta introducción de drogas por parte de migrantes. Además, Ebrard aclara que México no produce fentanilo, una droga sintética que se ha vuelto cada vez más problemática en el país
El gobierno mexicano está intensificando sus esfuerzos para combatir las acusaciones de algunos políticos republicanos estadounidenses en la guerra política del fentanilo. En respuesta, el presidente López Obrador ha movilizado toda la maquinaria disponible para contrarrestar las acusaciones, y ha presentado datos que respaldan su afirmación de que “México no es parte del problema, sino parte principal de la solución”, según el canciller Marcelo Ebrard.
López Obrador ha señalado que el fentanilo proviene de Asia, y que la mayoría de las personas encarceladas por tráfico de drogas en Estados Unidos son ciudadanos de allí. Además, el presidente ha destacado la incautación de toneladas de fentanilo en México, así como la destrucción de laboratorios clandestinos donde se procesa dicha sustancia.
El presidente López Obrador ha declarado que, aunque México no produce fentanilo, está dispuesto a ayudar en la lucha contra su tráfico y consumo. Aunque en ningún momento ha involucrado a su homólogo estadounidense, Joe Biden, el presidente mexicano ha dejado claro que su objetivo es proteger a su pueblo y combatir este flagelo.
El presidente también ha enviado una carta al presidente chino solicitando cooperación e información para detener el tráfico de fentanilo.
En una carta dirigida al presidente chino, Xi Jinping, López Obrador ha destacado que el consumo de fentanilo en México es bajo en comparación con Estados Unidos, donde la droga ha causado más de 107,000 muertes en 2021. El mandatario ha dirigido su mensaje a China después de que un grupo de senadores estadounidenses de ambos partidos lo solicitaran durante una reciente visita a México.
La postura del presidente mexicano es clara: México no es responsable de la producción de fentanilo, pero está comprometido en ayudar a combatir el tráfico de esta sustancia peligrosa en beneficio de la seguridad y la salud pública
El canciller mexicano Marcelo Ebrard no se queda callado ante las acusaciones de Estados Unidos sobre el tráfico de drogas. En una conferencia de prensa, Ebrard destacó que mientras Estados Unidos se queja del tráfico de drogas, México contrarresta con la entrada de armas por la frontera norte, causando la pérdida de 1.791 vidas en el país.
El canciller recordó que en Estados Unidos se venden armas con una simple licencia de conducir y que muchos las venden sin tener licencia. Ebrard desafió al senador estadounidense Lindsey Graham, quien acusó a los migrantes de introducir drogas en Estados Unidos, diciéndole que “no mienta” y que cualquier ciudadano puede comprar armas en cualquier esquina de Estados Unidos.
Ebrard pidió que Estados Unidos revise los vehículos en la última milla para evitar la entrada de armas a México, tal como México vigila la entrada de estupefacientes a Estados Unidos en las aduanas.